Una rubia diferente

Dicen que las rubias (¡las de verdad!) son tontas, que no saben que 2
 y 2 son 4,  que no tocan un libro en su vida, que aspiran todas a ser modelos y que sólo son apariencia y nada más. Supongo que conozco la excepción que confirma la regla. O que de por sí la afirmación es falsa, que también es posible. La verdad, no lo sé. Sólo puedo decir que ella es dulce, divertida y de mayor quiere ser periodista. Habla 4 idiomas, es experta en futbol (una especie de enciclopedia humana) y siempre conoce las últimas tendencias en moda. Fotógrafa en ciernes, chica con carácter, amiga impagable. ¿Qué no le entran las mates? Como a la mayoría ¿Qué a veces no sabe el significado de alguna palabra? Es que las personas no somos diccionarios andantes, a ver si nos enteramos de una vez.

¿Despistada?, seguramente. ¿Soñadora?, sólo a veces. ¿Extraordinaria?, SIEMPRE. Las horas pasan volando junto a ella porque te arranca sonrisas, te hace feliz. Todo es más fácil y más luminoso si ella está, aún no sé por qué. Puede ser porque es transparente, porque siempre dice lo que piensa, porque nunca finge ser otra persona. A lo mejor, en eso se basa nuestra amistad. La naturalidad, la franqueza. Para los que no lo comprenden, se trata de ser tú mismo y no lo que los demás quieren que seas, al fin y al cabo lo primero se acaba apreciando más que lo segundo. En fin, por si no ha quedado claro, la quiero mucho, dejando de lado su obsesión que roza la psicosis por el estado de su pelo (¡es broma!) y mis respuestas cortantes de vez en cuando (siempre con cariño, por supuesto).

No me queda mucho que decir, la verdad. Prefiero decírselo en persona, esta noche, su noche. La verbena de San Juan. Encima, va y nace la noche más especial del año, bañada por la luz chispeante de los fuegos artificiales, tendrá narices. ¿Significará algo? Sólo el tiempo lo dirá. Por ahora, me quedo con todos los recuerdos que plagan mi mente, momentos inolvidables que hemos compartido y con los sueños que espero que cumplamos juntas, porque estos años junto a ti son demasiado pocos, nos quedan muchas cosas por hacer aún.